martes, 18 de noviembre de 2008

aquí os traigo la segunda parte, que se titula:
Respuesta
Mí querida, si tú también supieras cuanto es lo que te extraño, sabrías que nunca deje de amarte.
Mi partida tan repentina se debió a una duda que dentro de mi creció, hasta en miedo convertirse. Pues mi duda era, en sí, si mis sentimientos aun eran correspondidos, luego de tantos años juntos, y por alguna razón que yo todavía desconozco te empezaste a distanciar poco a poco de mí, y esa duda comenzó a ser mi más profundo temor.
Mi amada, no sabes cuanto desearía volver a darte tan dulce despertar, pero ante el temor que te he descrito, he cometido un error fatal:
Aun amándote, he encontrado a otra persona para pasar el resto de mis días, viviendo en la mentira, me case con ella y, aunque yo no soy feliz, ella si, no la amaré pero si la quiero.
Mi amada y querida te prometo, que algún día, no se cuando, quizás cuando mi esposa ya de su último suspiro, o su amor por mi acabe. Yo volveré por ti, a buscarte, y así podremos pasar el resto de nuestras inmortales vidas, juntos otra vez.

2 comentarios:

  1. Perfecto Sabri tu carta! Suerte en tu futuro y no tengas miedo a expresarte. seguí así.
    Romi alias Chica Tokita jeje

    ResponderEliminar
  2. guauu! repito que escribes muuy muy muy bien..
    me quize matar cuando le dice que se casóo :S
    jajaja de verdad! que mal.. pero muy lindo

    ResponderEliminar